PLAZA MAYOR

La construcción de una gran plaza porticada, que regulara el comercio y que articulara la vida ciudadana, fue una idea que se inició en tiempos de Felipe II, pero será en 1617 cuando Juan Gómez de Mora, en tiempos de Felipe III, proyecte esta plaza como un  rectángulo de 120 m. por 94 m., con 477 balcones, que tras varios incendios obtendrá su estructura definitiva de manos del arquitecto Juan de Villanueva a finales del siglo XVIII. El uso cotidiano de la plaza era de servir como marco para el único mercado que se celebraba en la ciudad, y que llevaba celebrándose en el mismo lugar desde época medieval en que la plaza era conocida como Plaza del Arrabal puesto que se encontraba fuera de las murallas.

Uno de los edificios más importantes del conjunto es la Casa de la Panadería, que como símbolo de poder de la corona era de uso exclusivo de la familia Real para presenciar desde sus balcones cuantos acontecimientos se celebraran en la plaza. Destaca en su interior el gran Salón Real, donde los monarcas españoles recibieron durante dos siglos al pueblo y aplicaron justicia, y desde cuyos balcones  presidieron los grandes festejos y actos diversos organizados en su honor.

La Plaza Mayor se convirtió durante el siglo XVII en lugar permanente de representación. Los espectáculos más sobresalientes tuvieron lugar en su recinto, previamente acondicionado: justas poéticas, entradas triunfales, autos de fe, juegos de cañas y autos sacramentales. Uno de los primeros actos festivos que tuvieron lugar, en 1620, fueron las fiestas con motivo de la beatificación de San Isidro dos años antes. En la misma plaza, en mayo de 1621, fue proclamado rey Felipe IV. Los propietarios de las casas tenían que ceder sus balcones al Concejo  con ocasión de las fiestas, y éste los alquilaba a la nobleza y a la alta burguesía.

La estatua ecuestre situada en el centro de la plaza procede del palacete de la Casa de Campo, donde se había colocado en 1616. El modelo del rey fue pintado por Pantoja de la Cruz, Juan de Bolonia la dibujó y vació en bronce. Pero tras su muerte fue concluida por el florentino Pietro Tacca.

Dejar un comentario

Your email address will not be published. All fields are required.